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¿Sabes por qué te quiero? Porque aunque en algún momento hayas sido tú el que me ha hundido, también has sido el que me ha sacado a flote. Porque por muchos obstáculos que haya, vienes a por mí. Te quiero porque cuando te digo que me dejes no paras de intentar que cambie de opinión. Porque cuando descargo mi rabia contigo, no me dices nada, simplemente, me dices que me quieres. Te quiero porque aunque el mundo se estuviera derrumbando en este mismo instante, tú me dijirías que todo irá bien. Y por muy increible que parezca, te creería, lo sé. Ahora ya sabes por que me encantas. No podría cambiar todo esto. No podría cambiar por nada el amor que siento por ti.